Por Nicole Sánchez Gaete 12- abril - 2011
Introducción
En los últimos años son numerosos los casos denunciados producto de abusos sexuales a menores cometidos por miembros de la iglesia católica. No solo en nuestro país ha sido bullado el tema, que durante muchos años se quiso esconder, sino también en la comunidad internacional, donde cada día son más y más los casos que se investigan producto de querellas interpuestas por victimas de dichos abusos, quienes luego de mucho tiempo se atreven a declarar las agresiones cometidas en su contra.
Por otra parte, no podemos dejar de lado la opinión de la iglesia, que se ha visto envuelta en este escándalo y por supuesto deben responder a tales acusaciones.
Presentación del problema
Cada año son más las denuncias que se presentan en los diferentes tribunales del país en contra de miembros de la iglesia, quienes son acusados de abusos sexuales y violaciones a menores. En los últimos días, son dos los casos más mediáticos en la contingencia nacional.
Por un lado tenemos el denominado caso Karadima, en donde se acusa al sacerdote Fernando Karadima de haber cometido una serie de abusos en contra de menores y jóvenes. El día 21 de abril de 2010 se publica en los medios de comunicación la existencia de un cúmulo de denuncias en contra del sacerdote. Más tarde prestaron declaraciones varios profesionales víctimas de abusos que por años guardaron silencio. El caso aún se encuentra en proceso en los tribunales de justicia. Los antecedentes de este caso fueron enviados directamente al Vaticano, aunque el tribunal eclesiástico lo declaró culpable de los cargos que se le imputan, siguen apareciendo más testigos quienes además inculpan a altos cargos de la iglesia católica de haber encubierto dichos abusos y acallado a las víctimas.
Otro caso que ha dado que hablar por estos días es el de la “madre” directora del colegio Las Ursulinas: Isabel Margarita Lagos Droguett quien fue denunciada ante el Vaticano por dos ex alumnas del establecimiento por problemas administrativos y presuntos abusos sexuales. El caso se investiga tanto en el tribunal eclesiástico como en los tribunales de justicia. Además en cuanto se hicieron públicas las declaraciones de las victimas sor paula –como es conocida Isabel Lagos- fue removida de su cargo y se encuentra actualmente en Alemania.
Pero no solo en nuestro país se dan casos de este tipo, pues a diario se registran nuevas denuncias que acusan a miembros de la iglesia de pederastia reiterada. En Bélgica por ejemplo, se dio a conocer el caso de 28 niños que fueron abusados por el sacerdote Luc Versteyler entre los años 60 y 80. Además de la reciente suspensión de las labores administrativas de 21 sacerdotes en Filadelfia, también por el mismo delito de abuso a menores, además de ordenarse una investigación minuciosa de cada caso en particular.
Las cifras señalan que solo en Estados Unidos entre 1950 y 2002 eran más de 4.300 los sacerdotes acusados por abusos de más de 10.600 menores[1] y los casos han aumentado hasta la fecha.
En Chile en tanto, son cientos las denuncias que se presentan cada año, lo que por supuesto, crea un debilitamiento dentro de la iglesia y una pérdida de la confianza por parte de la comunidad en dicha institución. Es así como en mayo de 2010 se publicó una encuesta realizada por el CERC para determinar la confianza de los chilenos en la iglesia y los datos fueron categóricos: de un 53% en abril de 2009 cayó hasta un 34% en mayo de 2010[2].
La iglesia por su parte también se ha referido al tema, reconociendo los casos de abuso y aceptando las críticas que han calificado de insuficiente el actuar del Vaticano ante los casos denunciados. Benedicto XVI como máxima autoridad eclesiástica ha pedido perdón a las victimas abusadas y a sus familias por el gran daño que han causado y a la vez ha señalado que los acusados deberán responder por los delitos que se le imputan ante los tribunales eclesiásticos y de justicia de cada país.
Conclusión
Muchos son los casos que en las ultimas décadas han llegado a las cortes de chile y del mundo, en donde se inculpa a sacerdotes de pederastia y abusos contra menores, así como también cada día se dictan nuevas sentencias que han marcado un precedente en el tema, que se mantuvo en silencio durante largos años, sin embargo hoy son muchas las victimas que se atreven a contar lo sucedido. Todo esto le ha costado un alto precio a la iglesia católica quienes han visto roto el orden que siempre tuvo esta institución, debiendo enfrentar fuertes críticas y la pérdida de credibilidad en la sociedad.
Sin duda este tema seguirá dando que hablar por muchos años más, pero el paso más importante ya se dio: romper el silencio y el temor de las víctimas.
Metodología de la Educación
Pedagogía en Castellano
Universidad de Playa Ancha
Campus San Felipe
- Diario La Tercera, edición impresa del día martes 15 de marzo de 2011.
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